La movilización ciudadana ha obtenido una resonante victoria sobre el afán especulativo y destructor del Partido Popular que gobierna la comunidad murciana y el ayuntamiento de la capital.
La Murcia musulmana del siglo XIII, hallada cuando se pretendía construir un aparcamiento en el centro de la ciudad, se salvará. Pero hay que agradecérselo a los ciudadanos que se movilizaron contra el empeño cerril de las autoridades peperas de desmantelar el yacimiento arqueológico. Han sido la fiscalía y una juez los que han parado los pies a los enemigos del Patrimonio, de la Historia y de la Cultura. Porque a estos solo les interesa la rapiña y el dinero.
El juzgado ha frenado, en el último minuto, el traslado de los restos, como pretendía el Ayuntamiento, después de una denuncia presentada por la fiscalía.
Después de estas intervenciones de la Justicia (y solo después), el presidente de la Comunidad de Murcia, Ramón Luis Valcárcel, y el alcalde de la ciudad, Miguel Ángel Cámara, han declarado que la magnitud del hallazgo imposibilita la construcción del aparcamiento. Ahora, quizá, quieran apuntarse el tanto y tal vez lo consigan dentro de unos meses porque la memoria de los ciudadanos es flaca.
Pero no nos olvidemos: las autoridades querían destruir el yacimiento y solo la iniciativa popular, secundada por los jueces, lo ha impedido.
Y en este caso no pueden acusar a Baltasar Garzón de nada.
Felicidades a los murcianos.
La Murcia musulmana del siglo XIII, hallada cuando se pretendía construir un aparcamiento en el centro de la ciudad, se salvará. Pero hay que agradecérselo a los ciudadanos que se movilizaron contra el empeño cerril de las autoridades peperas de desmantelar el yacimiento arqueológico. Han sido la fiscalía y una juez los que han parado los pies a los enemigos del Patrimonio, de la Historia y de la Cultura. Porque a estos solo les interesa la rapiña y el dinero.
El juzgado ha frenado, en el último minuto, el traslado de los restos, como pretendía el Ayuntamiento, después de una denuncia presentada por la fiscalía.
Después de estas intervenciones de la Justicia (y solo después), el presidente de la Comunidad de Murcia, Ramón Luis Valcárcel, y el alcalde de la ciudad, Miguel Ángel Cámara, han declarado que la magnitud del hallazgo imposibilita la construcción del aparcamiento. Ahora, quizá, quieran apuntarse el tanto y tal vez lo consigan dentro de unos meses porque la memoria de los ciudadanos es flaca.
Pero no nos olvidemos: las autoridades querían destruir el yacimiento y solo la iniciativa popular, secundada por los jueces, lo ha impedido.
Y en este caso no pueden acusar a Baltasar Garzón de nada.
Felicidades a los murcianos.
Pues menos mal...
ResponderEliminarLo que demuestra que muchos agoreros de los cojones no tienen razón: la gente SÍ es poderosa y SÍ puede cambiar las cosas. Hasa el infinito y más allá.
ResponderEliminarEstoy con Dezaragoza. ¡Corcholis! Y yo que creía que iban a pasarse por el forro la opinión de la ciudadana. Se ve que no ^^
ResponderEliminarClaro que la gente manda y lo de Murcia estaba tomando demasiada fuerza como para que el Gobierno y lso especuladores hicieran lo que les diera la gana. Y ya era de que los murcianos se movieran en algo además de la consabida guerra de las urbanizacione sy campos de golf, estooo, quería decir del agua...
ResponderEliminarEs cierto, maño, de lo contrario estbamos apañados. Pero ya verás como esto no pasa factura electoral.
ResponderEliminarKir, no se lo han pasado por el forro porque cuando llegaron los operarios para desmantelar el yacimiento la gente bloqueó las puertas. Es decir acción directa. Es lo único que funciona.
Santi, con lo del agua hay mucha demagogia. Debería ser los propios murcianos los que se opusieran a que se siembre su costa de campos de golf, al tiempo que se destruye la costa.
Bravo por los murcianos.
ResponderEliminarEfectivamente: acción. Lo otro, es decir, votar cada cuatro años ya se ve de qué sirve.
Pero ya verás, Juan Carlos, como a la hora de votar este se olvide. O incluso no decate que el PP presente como un logro haber salvado la Murcia musulmana.
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