Un mes se
cumple desde que estoy al pairo con calma chicha. Cinco lunes al sol con sus
días intermedios al completo. Un mes de vacaciones forzosas al que le esperan
otros cinco más por delante. En este tiempo, que esperaba de sosiego y de grandes
espacios de tiempo vacíos, me ha sucedido de todo y casi todo malo. Con la “santa”
con un broncoespasmo en parada casi total como yo; se me rompieron la impresora y el microondas. Cuando
estaba en un centro comercial, con el microondas nuevo en el maletero del
coche, se me fundió la batería. Pocas cosas hay que me den más rabia que las
averías del coche: llamar al servicio de emergencias, ir al taller etc.
Afortunadamente, en un ahora tenía batería nueva instalada. Al menos el seguro
funciona bien.
Mi hija mayor
dejó la casa en la que vivía de alquiler. Se fue un mes antes de que acabara el
contrato y la casera le dio vía libre e incluso le prometió que le devolvía la
fianza. Pero a la hora de la verdad, “donde dije digo, digo Diego”. La casera
es un mal bicho sin palabra, una impúdica sinvergüenza. Dice la empleada de la
inmobiliaria que es una señorona de alto estatus económico. No me extraña, con
esa moral de saqueadora de jovencitas llegará lejos. Se ve que cuanto más
dinero tiene la gente más avariciosa se vuelve. Le he dado su nombre a una prostituta trepa de la novela que estoy escribiendo. Aunque me estoy
planteando si se lo merece. Mi personaje es mucho más honesto.
Pensaba que
en noviembre la cosa sería más llevadera, pero los indicios no apuntan por ahí.
Probablemente mi hija pequeña (tengo dos) tenga que hacerse una artroscopia en la rodilla para
arreglar un menisco averiado. Nada grave.Pero fundamental para poder practicar su deporte favorito: el roller derby.
Este mes,
pese a todo, he tenido tiempo para avanzar en las dos tareas que impuse al saber que sería victima de un ERE temporal: Hacer
ejercicio, algo que tenía olvidado desde hace años, y adelantar en mi novela.
Todas las
mañanas salgo a caminar/correr por la orilla del río. Me llevó la cámara y me
detengo a admirar la fauna, que no es poca, como ya sabrán los que me siguen en
el Facebook, donde cuelgo las fotos. Madrid Río es un espacio muy destacado de
la ciudad que merece la pena visitar y disfrutar, a pesar de la gran cantidad
de locos que circulan en bicicleta. La gran cagada de Ruiz Gallardón (el actual
Ministro Mordaza) en este proyecto, además de arruinar a los madrileños, fue mezclar a peatones y ciclistas por los
mismos caminos. Algún día tendremos un disgusto.
De la novela
no diré nada nuevo sobre lo que ya escribí aquí cuando la comencé; solo que
escribo a buen ritmo pero sin agobios, cuando me apetece y enriqueciéndola cada
día con nuevos giros. Me gusta improvisar y retorcer la historia. Se disfruta
más escribiendo una novela cuando no sabes qué va a suceder, cuando improvisas,
cuando la propia trama te lleva por derroteros que tú desconocías.
Hay
escritores a los que les gusta tener todo atado y bien atado. A mí no. Prefiero
que fluya y que la historia me lleve a mí en lugar de dirigirla yo. Confío en
acabarla antes de fin de año.
A todo esto,
mi editor sigue desaparecido en combate desde hace más de un año. Espero que
algún día resurja de donde quiera que esté y sepa algo de él por algún conducto
que no sea su Facebook.
También he
tenido tiempo de hacerme un tatuaje, lo que ha sorprendido a algunos de mis
amigos. ¿Por qué me he tatuado? ¿Y por qué no? Era el único en casa que tenía
la piel virgen. El motivo que me he grabado en el brazo es lo que yo llamo “La
dama de fuego” y que reconocerá cualquiera que haya leído mi novela “Sangre de caballo”. No obstante, lo explicaré con más detalle en otro post. El tatuaje me lo ha grabado DeCraneo, un gran artista que recomiendo desde aquí. Bueno y a mejor precio.
En resumen,
que estoy muy a gusto en el paro (que no se entere la Báñez que me quita la mierda
de prestación), lujo forzoso que me puedo permitir estos seis meses porque yo
no he sido de esos malvados que han vivido por encima de sus posibilidades y
llevado a España a la ruina. Es un
placer inmenso no ver ciertas caras y no cumplir determinadas rutinas
alienantes. Pero en este asunto prefiero no entrar, al menos de momento. Tiempo
habrá.
Quería hacer
un balance de mi primer mes subvencionado por el INEM y me ha salido algo así
como Querido Diario. No importa, ahí queda. Espero no haber aburrido.
Madre mía, sí que te ha pasado de todo.
ResponderEliminarBueno, a ver si los cinco siguientes van viento en popa.
Saludos.
Eso espero, Juanjo. Me conformo con que la familia recupere la salud. Los electrodomésticos son lo de menos.
Eliminar¡Un tatuaje!. Me gustan.
ResponderEliminarBuen 'feeling' lo que cuentas de la novela.
Entrada completa.
Los cangrejos del fb están para comérselos. :)
El tatuaje ya lo mostraré por aquí. La novela espero que me salga decentita y de los cangrejos, olvídate si no quieres mutar.
EliminarComo los niños.
ResponderEliminar¿A qué te refieres?
EliminarComo los niños del FB, "está para comérselo", suelen escribir.
ResponderEliminar:)))
Amigo Paco, vaya rachita mala.
ResponderEliminarHacen unas cañitas cuando aparezca por Madrid? (voy frecuentemente como efecto colateral de mis algo menores penas)
Parece que las desgracias se comportan como epidemias. Sobre todo cuida la salud y deja que te cuiden, el resto, del r
esto seguro que consigues retorcerlo para encontrar fuente de inspiración y continuar escribiendo tan deliciosamente bien.
Prometo no contarte mis penas.
Un abrazo fuerte!
Gracias, Markos. ya no me quejaré más. Y promero no hacer balance cada mes. las cañas, por descontado. Yo ahora tengo mucho tiempo.
EliminarSí parece una página de un "querido diario", pero no aburre.
ResponderEliminarEspero que no pases a engrosar las estadísticas de la Ley de Murphy.
Yo tampoco entiendo qué pasa con tu editor. Verás por qué lo digo. Cuando me dejo caer por algunas librerías de todos conocidas, busco Cuando el cielo se caiga. Ni esta ni tus otras novelas están en los estantes. Harto de la situación, ayer, que fui de compras porque tengo tres cumpleaños este mes, encargué por fin Cuando el cielo.... Esto quiere decir que los ejemplares están, pero no los sacan a la venta.
Gracias, vecino, sobre todo por comprar mis libros. Es un honor. El problema no es ese. Hay ejemplares porque no se vendieron en su momento. Depsués ya es muy dificil que los libreros los mantengan en los estantes. Si los devuelven recuperan el dinero. Quizá en su día ("Cuando el cielo" es de 2001, si no recuerdo mal) no se promocionó o no se comercializó como debiera, pese a ser un premio literario relativamente importante.
EliminarPero mi extrañeza no va por ahí. En fin, aguantaré hasta fin de año y veremos.
Joooder!!
ResponderEliminarMenudo estercolero es el País de Mierda!!.
Bueno, a mi me quedan dos telediarios también...o uno si sigo cantando canciones de La Polla Records en el trabajo...un nido de gaviotas!!.
Creo que cuando llegue mi ERE me voy a desprender de la puta educación recibida que me convirtió en un buen y cumplidor súbdito...y haré un "breaking bad" a la española...me voy a tatuar una calavera en mitad de la frente!!
Tu editor es un GILIPOLLAS!!...menudo INÚTIL!!... como diría un piojoso Galo...¡¡QUE CAIGA EL CIELO SOBRE SU CABEZA!!...con lo bien que lo he pasado con esas dos novelas del cabrero visigodo!!
Ánimo tío!!...y si ves que no...siempre tendrás un hueco en la Armada de los Tatuados Insurgentes para la Liberación Anticapitalista!!
Saludos!!
Gracias, Atila, eres un amigo. Espero que haya más entregas del cabrero visigodo como le llamas, aunque ahora estoy a otras cosas. Quién sabe, lo mismo estos cambios son para crecer. Yo así lo pienso. Un abrazo y cuida tu nido de gaviotas.
EliminarYa lo dice el refrán: "No hay mal que por bien no venga" Pues eso. Saca el máximo partido al paro, a pesar de los pesares. Avanza en tu novela que, dicho sea de paso, no sabía que escribías. Pero si, como dices, te dejas llevar por ella, convencida estoy de que es un buen presagio. Y ánimo pues como dijo alguien: "los cambios siempre son para mejor". Y es cierto. A mí siempre me fueron bien.
ResponderEliminarGracias, Teresa. Eso intento, sí, sacar el máximo provecho de la situación. Espero que sea para bien, naturalmente. Sí que escribo. Aquí a la derecha del blog tienes todas mis novela,s por si te animas a leer alguna. Un saludo.
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