(continuación de Matar a la bestia) En la comisaría le dieron una paliza y lo humillaron. Querían saber quiénes eran sus cómplices. De nada le sirvió explicarles que era un parado enfermo de cáncer de páncreas al que iban a desahuciar la semana siguiente. No lo creyeron hasta que tuvieron en la mano la información del INEM, del banco y de la Seguridad Social. Era cierto. Le habían diagnosticado un cáncer de páncreas el año anterior y debido a las continuas inasistencias al trabajo, había sido despedido de la multinacional en la que trabajaba. No pudo hacer frente a la hipoteca y el banco ya le había anunciado el desahucio. Para colmo, el oncólogo le comunicó, con gran pesar, que su cáncer era difícil y que a la Seguridad Social no le merecía la pena prescribirle el carísimo tratamiento que necesitaba para alargarle la vida unos meses. Aunque si quería podía pagárselo de su bolsillo…

Ja,ja,ja... Productos de primera necesidad...
ResponderEliminarAy, vecino, cómo han cambiado las necesidades de la gente en apenas diez años. Hay quien prescindiría de comer antes que renunciar a su móvil.
ResponderEliminarEstoy totalmente segura...
ResponderEliminarBesicos
Jajajaja...joé...precisamente otro de los objetivos de nuestros buenos amitos es optimizar el personal humano. Los fabricantes de esos cacharros que mencionas ya los producen usando millones de robots...p'a que la peña disfrute de su tiempo libre...supervisando las nubes.
ResponderEliminarCada día, querido Paco, veo más clara y distinta esa teoría tan tuya del abaratamiento del capitalismo. Nunca me he sentido atraído por las teorías conspiranoicas (¡qué adjetivo tan logrado!), y la que tú sostienes tiene, sin duda, componentes del género, pero los hechos son tercos, y dicen que: en Grecia manda ahora un exvicepresidente del BCE cuyo mandato coincide con la gesta de la gran crisis finaciera; en Italia manda un exasesor de Goldman Sachs en el momento justo en que la compañía ayudó a ocultar a la UE el enorme déficit de Grecia; en España, un exconsejero para Europa de Lehmann Brothers que ejerció como tal entre el 2006 y el 2008, justo cuando quebró la compañía, y hace un rato me entero de que el BCE ha nombrado economista jefe a Peter Praet, expresidente del Fortis Bank, un banco con una trayectoria altamente sospechosa durante los últimos años (tuvo que ser, ¿cómo se dice?, ah, sí, "rescatado" por los gobiernos de Luxemburgo y de Bélgica para no hundirse él mismo y a sus confiados clientes.
ResponderEliminarMe da en la nariz, por tanto, querido Paco, que el Sommelier anda detrás de todo esto… Ah, y por supuesto, que sus "harvesters" han hecho un buen trabajo…
(Para entender esto último habrá que leerse la próxima novela del maestro...)
Y yo, Belén.
ResponderEliminarAtila, cuanto más paro hoy, salarios más baratos mañana.
Querido Jaime, ya veo que mi machacona instencia en el asunto está logrando doblegarte... o abrirte los ojos.
Hablando de Los Harvesters, te anuncio que ya terminé la novela y ahora estoy revisándola.
Vecino, quizá tendría que haber escrito "primera necedad". ¡Lo que hacen dos letras!
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