Ir al contenido principal

Ser primario

 Odio.

Lanzó la piedra con tanta rabia
que dio la vuelta al planeta
y le golpeó en la nuca.

(Fundido en negro)








(La foto es de Esther Galván)

Comentarios

  1. Anónimo14:00

    Eso sería una justicia fabulosa. Y en el fondo el odio es autodestructivo.

    Me gusta la foto, incluso quitando la H de la pintada.

    Salu2

    ResponderEliminar
  2. Es lo que le va a suceder a once millones de personas. Sí, no me había percatado de ese detalle de la foto. Apoyo la moción.

    ResponderEliminar
  3. Odio y rabia son dos hermosas palabras que también nos han sacado de más de un apurillo.

    me he perdido con lo de los 11 millones.

    Saludos !

    ResponderEliminar
  4. Sin duda, Atila, pero sin prescindir de la inteligencia, que nos distingue de las bestias.
    ¿Once millones? Perdón, 10.830.693 para ser más exactos. Aunque como toda generalización puede resultar injusta.

    ResponderEliminar
  5. Ay coñio!!, jaja...ni cuen'...se me había olvidao el simulacro democrático del otro día!!

    ResponderEliminar
  6. Uf.

    Claro que el odio es autodestructivo. Pero antes de llegar la piedra atraviesa otras calabazas.

    Tengo que romper una lanza por las bestias. Cuando se habla de primitivismo o de impulsos primarios en el ser humano, se piensa en una condición o stucación cercana a la animal; pero dudo de que los animales odien.

    Por otro lado, un beso de amor no se lo doy a cualquier espécimen.

    ResponderEliminar
  7. Quería decir "situación".

    ResponderEliminar
  8. No sé si llegará esa justicia, pero ojalá...

    Besicos

    ResponderEliminar
  9. Ahí le has dao' Atila.

    Ya lo creo que los animales no odian, vecino. las bestias simplemente te muerden si las perjudicas. Los llamados seres humanos se limitan a votar al contrario, aunque el contrario sea más peligrosos.

    Belén, la justicia es la que uno se busca, visto como están las cosas...

    ResponderEliminar
  10. Amor con amor se paga. En este caso, que el odio se le devuelva al que odia, no parece tan injusto.

    Saludos.

    ResponderEliminar

Publicar un comentario

Entradas populares de este blog

Hipatia

El anuncio de que el cineasta Alejandro Amenábar estrenará en octubre próximo Ágora , una superproducción sobre Hipatia de Alejandría , ha estimulado la publicación en los últimos meses de algunos libros, tanto novelas como estudios históricos, sobre este personaje del que tan poco se sabe. A esta última disciplina pertenece la obra Hipatia ( La esfera de los libros ), de la profesora de la Universidad de Málaga Clelia Martínez Maza . Se trata de un estudio muy completo y riguroso de la filósofa alejandrina, una de las mujeres más destacadas de la Antigüedad, quien, además de llegar a ser la directora de la Biblioteca de Alejandría, fue docta en matemáticas, filosofía y astronomía. La intransigencia y la violencia de la Iglesia cristiana de la época acabaron, en dos episodios terribles, tanto con la biblioteca como con Hipatia, que fue asesinada de forma brutal. Martínez Maza hace un magnífico retrato de la que fue una de las ciudades más importantes del Imperio en los ...

España, en almoneda

No pararán hasta vaciar el Estado de todo aquello que les sea aprovechable. De nada sirven las políticas tradicionales para evitarlo porque ese es el medio en el que se mueven los especuladores. Viven en ese magma como pez en el agua. Hasta que el Estado no se quede en el cascarón, como el caparazón de un molusco muerto, no se detendrán. Los vampiros de la especulación internacional, los fondos de inversión ( hedge funds ) que manejan cantidades ingentes de dinero, varias veces superiores a los Presupuestos Generales del Estado español, saben que España esconde mucha sustancia que sorber, es decir, mucho sector público que captar para la especulación privada: la sanidad, las pensiones, la educación, los transportes, el agua, las costas urbanizables, el juego, los astilleros, las fábricas de armas... La intervención de España, como antes le sucedió a Grecia, Irlanda y Portugal, supondrá la venta a un precio irrisorio de todos estos sectores públicos para obtener liquidez. España se ...

Diario de Jürgen Toepfer: dignidad

La dignidad no es una virtud consustancial al ser humano. En nuestro caso solo floreció cuando la colocamos en la punta de las bayonetas. Jürgen Toepfer ,  mercenario en la RD del Congo